derecho de admisión

viernes, 22 de agosto de 2008




Cenamos con la injusticia sentada entre los dos. La injusticia se bebió un vaso de vino y comió con ganas, mientras nosotros apartábamos la pasta que había en el plato y picoteábamos la ensalada. Estábamos dominados por el miedo, y la injusticia se sentó con nosotros, gorda y victoriosa, intocable.


del libro Mentiras piadosas de Lisa Unger




quiero que mi Alma tenga derecho de admisión, no quiero que la injusticia (o algún otro visitante indeseable) se siente a mi mesa


© 2008 Alma

9 hablaron con Alma:

Juanjo Montoliu dijo...

Ejerce tu derecho de admisión no sólo con la injusticia, también con la envidia, la cólera, el egoísmo, la impotencia, el desánimo, el desamor, etc.
Pero de vez en cuando deja que alguien tan poco recomendable como yo se acerque a tu mesa.

Besos.

Єѕтnoм dijo...

???
Me he perdido.

Anónimo dijo...

Es como las visitas non gratas...
De esas que se presentan de improviso y son capaces de quedarse a comer, a dormir, a vivir una temporada contigo.
Una vez escribí sobre esas visitas...
Ahora incluso tengo visita, ingrata y desagradable.
Me parece que colgaré el cartel sobre el derecho de admisión en la puerta de mi corazón.

Y tú, si se te sienta de nuevo a la mesa un ser de esos, vomítale encima, a ver si se va!
Amos, que no la dejan a una ni comer en paz!


Un besito con mucho alimento!


Äfrica


P.D. Por cierto, ayer una visita real, esta vez grata, me impidió estar contigo antes aquí en tu casita. :D

Raúl dijo...

Siento decirte que no va a ser posible. Hay invitados que se cuelan de rondón queramos o no los anfitriones, nos soliviantemos ofendidos y pretendamos echarlos de nuestra mesa. Verbogracia; el miedo, el rencor, la injusticia,... ¡pues no hay!.

Anónimo dijo...

(Llevo bien las raíces, si... las hojas verdes y lustrosas... las motitas en sus sitio (nada ostentoso tampoco) y el rojo subidito como le gusta a Alma... ala, ya estoy lista)

Alma! Me presento ante ti con mis mejores galas, que yo me siento tan bien en tu casa, a la mesa o a los pies de la cama, ya lo sabes. Y te canto por bulería si quieres, jejejeje.

Esperemos que la gorda no tenga que cantar para que finalice todo, pa eso te hago yo un gallo y perrrrfecto!

Un besito enorme y maduixero!!

Dante Bertini dijo...

a mí me lo parece o tienes una declaración de amor encabezando estos comentarios?
Lo de poco recomendable suena absolutamente sexi. Yo que tú lo dejaba entrar, aunque con precauciones.

Mónica Sánchez Escuer dijo...

El problema es que la injusticia, la envidia, el egoísmo, el rencor y todos esos indeseables siempre llegan disfrazados a la mesa y , cuando menos lo pensamos, se sirven nuestras costillas.
Suerte, querida Alma, en el ejercicio de tu derecho. Un abrazo

Anónimo dijo...

Buenos días, venia a ver si querías tomarte un cafecito conmigo, es nessssssssssspreso, y si, como muestra de afectoamorcachondeo te he traido a giorgclúni pa ti solita, ya si eso luego os dejo solos... jejejeje...

Muas!

Anónimo dijo...

Hola, ola de mar..

Ojalá fuera así, pero me temo que todos pasamos por la injusticia, desde el momento que pagamos las consecuencias de las decisiones de otros... Casi es mejor no pensarlo, no crees? Yo es que ya me conformo con un minimundo, el mío, en él intento que no haya injusticia. La otra, la que viene de fuera, pues viene como la lluvia o como el granizo, no queda más remedio...
Por cierto, tú no te ibas de vacaciones en septiembre?.Si es así...espero que lo estés pasando muy bien y el sol no queme tu piel
Un beso
Aire

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