evolución

domingo, 27 de noviembre de 2011


ilustración Ester Garcia

El pequeño se hace grande
Creciendo.
Cómo se hace pequeño el grande...
¿Recordando?

Luis Miguel Gª de Amézaga





¿recordar es la única manera de recuperar la infancia?

32 hablaron con Alma:

Alex B dijo...

La infancia aún está dentro de nosotros. Los recuerdos nunca son exactos a lo que vivimos.
Hay ratitos en lo que seguimos siendo niños.
Un beso

abril en paris dijo...

La patria : nuestra infancia.
Nunca dejamos de acudir a ella. El lugar dónde fuimos felices..

Besos :-)

Anónimo dijo...

No va a ser encogiendo!!!
Puede que el hombre se haga más niño si siendo adulto es capaz de desprenderse de los prejuicios acumulados, que eso envejece mucho.
Aunque, chica, el pinopuente no creo que sea recuperable, jajaja!


Un beso

Una pajarita dijo...

El anónimo soy yo, una pajarita.

Es que he echado a volar antes de tiempo...ups!

:D

silvia zappia dijo...

el grande nunca se hará pequeño.
pero el niño que fuimos nos habita, no debemos olvidarlo.


mil besos*

Tempus fugit dijo...

Envejeciendo nos volvemos a hacer niños.


besos

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

¿Propiedad conmutativa,quizá?

Saludos.

Rochies dijo...

coincido con Rayuela, nos habita. Tal vez más golpeado, más confiado; pero está ahí desde siempre... sólo bastaría con lograr la frecuencia exacta para el ida y vuelta.

Belén dijo...

¡¡Jugando!!

besicos

Raúl dijo...

Pues no lo sé.
Hay alguans enfermedas, caracterizadas precisamente por la ausencia de recuerdos, que en verdad aniñan al adulto.
No lo sé.

Raúl.

awacat.es dijo...

Qué preciosa. Ojalá a todos nos pasara y siguiéramos recordando haciéndonos pequeños.

Un beso!

Miguel Baquero dijo...

Oye, qué buenísima la frase. Es completamente certera y genial

dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
dijo...

Perdona,escribí deprisa y no se entendía la letra.
Pienso que el niño nos habita.Solo que la sociedad nos "condena"a esconderlo como si eso fuera una actitud de inmadurez..
Rompiendo las normas de la sociedad,porque somos libres,aprenderíamos a dejar al niño jugando y soñando más a menudo.
Menos mal que en momentos de fragilidad,que no de debilidad,sale el niño con todas sus fuerzas!!
Besucos

Neogeminis Mónica Frau dijo...

El grande se hace pequeño MENOSPRECIANDO!
=)

Un abrazo!

Ricardo Miñana dijo...

Al llegar a la madurez siempre miramos atrás,
feliz semana.

Luis de Burg dijo...

creo que nunca crecemos, sólo fingimos ser grandes, fingimos ser adultos, fingimos ser responsables, porque cuando un niño nos invita a jugar, jugamos olvidando cuanto hemos crecido y cuanto hemos olvidado

Lo Siento por Interrumpir dijo...

Más que recordando, yo diría que no olvidando.

E. C. Pedro dijo...

No creo Alma. Tampoco me parece una buena alternativa recrearla, como tanto insiste la publicidad en que hagamos. Lo único que me ha funcionado es acompañar a mis sobrinos a cine: de nuevo los colores y el movimiento cobran todo su sentido.

¡Muchos saludos!

El peletero dijo...

La infancia no se recupera ni siquiera recordándola, a lo sumo se evoca.

Marcos Callau dijo...

Lamentablemente, es así o quizá recordando en versos.

lopillas dijo...

Cada vez que reimos con ganas, pero con ganas de verdad, de esas que nos duele la tripa y terminamos sin resuello.
Besitos y muchas carcajadas ricas, alma!

liver dijo...

Muchos llevamos dentro un pedacito de niñez que no estamos dispuestos a perder, el resto lo evocamos con nuestros recuerdos.

mabel casas dijo...

no sería recuperar, por que la hemos tenido y se forjó con cada año de vida que fuimos sumando en esto que somos hoy
cada quién tiene por base unívoca los sucesos de la infancia, aunque no la recuerde, la quiera ignorar, o quiera seguir en ella eternamente
somos lo que somos en suma
y si en algunos días logramos sentirnos chicos sin proponérnoslo, es que aún sabemos darnos permiso, no nos etiquetaron del todo
gracias por tirar puntas de mirarnos buscando la respuesta
cariños

Ricardo Guadalupe dijo...

Yo de pequeño era más inhibido. Y pienso que para ser niño hay que desinhibirse. Cuanta más edad tengo más niño soy.

Un beso

Anónimo dijo...

Hola, ola de mar...
No creo que recordando al niño que fuimos, nos volvamos niños de nuevo. Pienso que sólo puede volver si aprendemos como ellos a asumir lo que nos trae la vida sin preocuparnos más allá de un momento. También vuelve aprovechando las oportunidades del juego inocuo en cada situación, no acostumbrándonos al día a día y volver a interesarnos por todo lo nuevo. La curiosidad, la ilusión, el juego, la aceptación son características del niño, que aún tenemos en nosotros, sólo que olvidamos utilizarlas en aras de otras cualidades más...adultas.
Un beso, del Aire

Juanjo Montoliu dijo...

Es una forma, pero no la única. A veces, basta con rodearse de pequeños.

Un beso.

bARE-eYED sUN dijo...

uy!

:-)

gracias, Alma.

..
.ero
.

MucipA dijo...

Paso por aquí para hacerme pequeñita...
¡Los recuerdos nos transportan al pasado y, por unos instantes, éste puede ser nuestro presente!

Un abrazo.

Elena Casero dijo...

Creo que la infancia es el lugar donde acabamos regresando, bien por recuerdos, bien por una regresión involuntaria de nuestra mente.

Un beso

Juanma dijo...

Cariño..........ya estoy aquí..
Será posible que algo tan pequeñito como 140 caracteres de Twitter me hayan hecho volver a escribir... Y eso que sigo currando como un bestia... Pero twittear no me come tanto la cabeza como bloguear.. Besos Reina. Te leo lo demás.

Lidia dijo...

Quizá recordando... y viviendo con mucha pasión cada instante, como si fuera el último. O el primero.
Un beso, Alma, deseando que te encuentres muy bien.

Publicar un comentario

di lo que quieras, estás en tu casa