no hay humo en mis ojos

lunes, 19 de marzo de 2012




relato incluido en el libro MICRORRELATOS FALLEROS 
patrocinado por LEVANTE-EMV




en mi voz    



Roma, 19 de marzo, 12 de la mañana. Salgo de convencer a un cliente de que imprima sus folletos con nosotros. Ha sido extenuante. Unos niños explotan un petardo en la acera, ríen, es su primera vez. El más pequeño empieza a llorar porque el humo se le ha metido en los ojos. La suave brisa me acerca el olor a pólvora, lloro también, no hay humo en mis ojos, solo añoranza en mi alma.

21 hablaron con Alma:

Noris Marcia dijo...

Alma, bellisimo pensamiento has publicado hoy.
Tu voz me parece divina, tu acento, tu gracia
al hablar. Me entristecio el final, sabes como lo entiendo...Gracias por tu comentario en mi blog. Un abrazo.

LaCuarent dijo...

Es realmente curioso como el olor puede hacernos sentir
Me ha gustado mucho
Un besote

Manolo Blog dijo...

No hay nada más intenso que el recuerdo evocado por un olor, un aroma, una fragancia...

Tempus fugit dijo...

Cuando se lleva pólvora en la sangre....



besos

Beatriz dijo...

Ese pellizco en las entrañas que sentimos cuando se refleja,de repente, como en un espejo, aquello que fuimos, aquello que vivimos. Lo que fue/es parte de nuestra identidad
Un abrazo

abril en paris dijo...

Nuestra memoria está llena de "pellizcos"..

Miguel Baquero dijo...

¡¡Hola de nuevo!! No sé qué tendréis los valencianos con la pólvora, es una cosa incomprensible, imagino, por más que se intente explicar...

Beatriz Salas Escarpa dijo...

Hola!
Me ha gustado mucho conocerte y llegar a tu blog.
Quería avisarte que al abrir la página todos los reproductores se disparan a la vez y se confunden las lecturas...
Espero no haberte molestado.
Un fuerte abrazo.

awacat.es dijo...

Esto, como otras cosas relativas a las añoranzas, no se pueden definir. No hace falta.

Yo te entiendo.

Besos!

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Pues lo mismo que en los míos.


Saludos.

Juan Herrezuelo dijo...

Espacio y tiempo fijados aun la máxima brevedad del relato, profesión, desaliento laboral, viaje a la propia infancia en un relámpago de pólvora. Excelente ejercicio de concentración, como átomo del que surge un argumento que trasciende en mucho los límites narrativos...

Anónimo dijo...

Hola, ola de mar..
A veces encontramos la excusa para llorar en el lugar menos esperado. Eso nos pasa por no llorar a tiempo.
Un beso
del
Aire

Una pajarita dijo...

Qué historia más larga con tan pocas palabras.
Hay toda una vida detrás.
Los olores son curiosos. A veces sólo somos capaces de olerlos los interesados. O sólo los percibimos porque anda de por medio la añoranza de lo que nos evocan.



Un besito

silvia zappia dijo...

el microrrelato es pura imagen. "ví" la añoranza en tu voz-

un beso*

lopillas dijo...

Despotricamos, nos quejamos, y maldecimos, pero ay la tierra cuando estamos lejos.
Me ha encantado. Muy buena inciativa los relatos falleros.
Besitos alma

Elena Casero dijo...

No sabía esto de los relatos falleros. ¿qué llevaremos dentro para que la pólvora nos inunde tanto?

Un beso

Gustavo Figueroa Velásquez dijo...

Este pequeño relato nos muestra la cotidianidad en donde los seres humanos son los personajes que encarnan el carrusel de la vida.
Saludos desde Suecia.

El peletero dijo...

Toda una metáfora, la primera vez, la risa y el olor a pólvora que ya no los abandonará. La añoranza, la humedad de los ojos y ese maldito cliente que ha hecho extenuante una cosa sencilla, vivir.

liver dijo...

Me gustan los relatos cortos, me gusta todo lo que es breve e intenso.
Besos

Juanjo Montoliu dijo...

Para los que nos hemos criado entre ruido y pólvora, encontrarla fuera es mejor que ser recibido en la embajada.

Besos.

Manco Cretino dijo...

En reiteradas ocaciones algún humito nos hace correr un lagrimón (aunque sea por dentro), que se abraza a recuerdos que son.. justamente, como el humo.

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